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Rima pa los compas cuenta la historia de un grupo de jóvenes raperos en el sur del conurbano bonaerense que, a partir de un taller de escritura en la grilla de un programa social, crearon una productora que realizó decenas de videoclips recorriendo diferentes localidades, apostando a convertirse en una cooperativa que les permitiera una salida laboral. Es un diario de rodaje y un libro de sociología al mismo tiempo. Mientras los capítulos del libro recorren el fuera de plano de esos videos, se arma una cartografía de las vidas populares en la pospandemia que muestra cómo se fueron limitando las ofertas de trabajo, la nocturnidad, los afectos, la vida en común, inaugurando una nueva geografía barrial.

Rima es también una investigación acerca del vínculo entre juventud y memoria. Van apareciendo en el relato algunos protagonistas que ya no están pero que se encuentran presentes en los murales del barrio 2 de Abril de Rafael Calzada y en estas infinitas canciones de rap.

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En sus talleres de autoconciencia de combate feminista y en sus clases de filosofía, Alessandra Chiricosta presta especial atención a la noción de fuerza y, en particular, a la de fuerza de combate. Vivió diez años en Vietnam y desde joven practica y enseña artes marciales de origen asiático: kung fu-wushu, jiu jitsu, muay thai, tai chi chuan. Las artes marciales, el pensamiento filosófico y los feminismos se entrecruzan en su vida y en su obra como prácticas de autoconciencia y de liberación.

Así, retoma una tradición que podría remontarse, al menos, hasta el movimiento sufragista de principios de siglo XX, con sus prácticas de jiu jitsu japonés como forma de defensa “sin armas” ante agresores armados o no. Todo en pos de un conocimiento y un ejercicio de la fuerza propia que permita desafiar el orden patriarcal de forma colectiva y evitar el enfrentamiento directo.

La pregunta estratégica, ayer y hoy, es cómo dar el combate bajo criterios que no sean los impuestos por el enemigo.

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Contra la tiranía del tema, los ensayos reunidos aquí procesan la transitada relación entre política y literatura con un despliegue de armas inusuales. Dalmaroni no teme al desacato ni a la imposición de sus obsesiones y arriesga la violencia de la escritura propia para dar cuenta de textos sinuosos y ya pensados antes.

Volver a leer escribiendo parece ser la clave de Dalmaroni para sacudirles el polvo de la detención con el que ciertas miradas los dejaron acomodados en los estantes, en nombre de ideas de «lo nacional» que vencieron hace rato, o en la búsqueda de rejuntar a bárbaros y civilizados en un campo que proyecta su tensión hacia el presente abúlico de la novedad.

Lamborghini, Puig, Saer, la gauchesca, Arlt o Pizarnik son causas, y también excusas, para poner a prueba las maneras de un decir singular y, en diálogo polémico con lo que lo rodea, estirar esos límites hasta lo inexistente.

Este libro no enseña nada, no hay imperativo moral sino apenas aquello que aparece muy pocas veces cuando un crítico escribe sabiendo que lo hace: persistir hasta rozar el corazón mismo de la literatura

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Cartas para mi abuela es un libro que nos interpela sobre el linaje ancestral, el cuidado, los afectos y el cotidiano de las mujeres prietas. Compuesto por una narrativa sensible y profunda, su escritura se basa en cartas que Djamila Ribeiro dirige a la abuela. Djamila es reconocida por aquellos textos teóricos en los cuales discute género y raza, en cambio, en este libro encontramos dichas discusiones desde una mirada intimista, la teorpia aparece en forma de memorias de vida, contadas con una soltura donde se destaca su valor literario. A lo largo de las páginas, vamos descubriendo cómo el racismo y els exismo atravesaron la subjetividad de la autora, desde su más temprana infancia, pero también cómo el amor, la religiosidad, el feminismo, la militancia, la ancestralidad y la maternidad la fortalecieron.

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¿Qué hace a una vida subversiva? ¿Qué la vuelve intensa y digna de ser vivida? Nunca me fui de casa no solo narra la vida singular de una mujer extraordinaria, sino que es también la historia colectiva de una generación que supo de resistencias e imaginaciones, de fugas, apuestas y derrotas.

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